miércoles, 8 de abril de 2015

Cabalgando...


He cabalgado
al centro quimérico de mis huesos,
al lomo de un universo
donde todo es un enigma.
He disfrutado del viento,
del gris de la tempestad.
El despertar ha sido un misterio,
las gaviotas me rodeaban
abrazando la fortaleza de mi cuerpo utópico.

Soy peregrina en un mundo de tiranos
donde la vanidad y la soberanía
es sinónimo de felicidad y libertad
mientras otros son arrollados vasallos.


María Sánchez- Abril/2015
( Reservados los derechos)

2 comentarios:

  1. Felicidades por este poema tan sutil. La vida es ese peregrinar del que hablas, donde observamos y somos observados. ¡Qué pena que la felicidad de algunos sea el sometimiento de tantos!
    Un beso.

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  2. Si, llevas toda la razón, Francisco....que pena que la felicidad de muchos dependa tambien de otros tantos y seamos tan diferentes unos de otros en la forma de sentir y de vivir la vida. Besos

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