Llueve fuertemente sobre los tejados sonoros de un patio
y el salpicar hace ecos continuos de suspiros.
La soledad habla,
gritan los silencios contenidos
y sale la lágrima
porque el recuerdo yace escondido.
Extiendo mi brazo y encuentro el vacío
en el lado izquierdo de mi lecho,
el vacío entre enredos de unas sábanas,
el vacío de tu aliento y el frio del silencio.
Una mejilla que se apoya sobre la almohada.
Se contiene el suspiro,
sale la lágrima...
La lluvia me acompaña.
M. Sánchez 22/5/14
Bello y triste poema.
ResponderEliminarMe gusta que la lluvia te acompañe mientra lloras en silencio.
Añoranzas de un amor perdido o muerto, que se recuerda en la soledad de noche lluviosa bajo la almohada.
Besos y feliz día.
Asi es amiga...la lluvia compaña esa soledad y esos recuerdos continuos de la persona que se extraña.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y mil besos.